Yo ni soy escritor

Toda la semana sin verte, mi barba es un desastre, no quiero poseerte, me muero por besarte la boca, piedra angular de mi vida loca, ambos sabemos que me toca pero me dejas desearte. Te vas por dias y dias y dias y mi simpatia se convierte en agonia y apatia, que alegria que sepas que no valgo para ti pero me dejes conquistarte con estas alegorias. Soy tus deseos representados por un tipo feo de esos que mas que bailar se convulcionan y da miedo, pero espero que entiendas que esto que digo es verdad: dejemos la ciudad un dia y tal vez no volvemos. Te lo ruego, juega el juego pero en mi equipo, esta soledad me va a matar ¿si sabes lo que digo? olvida el frio, acurrucate de espaldas a mi, es lunes y los lunes son pa ti, aunque no estes conmigo.

Hace ya muchos años, un hombre decidio pasar el resto de sus dias con una mujer. Una mujer con dos hijos. Trabajo duro para que nunca les faltara nada tanto a su mujer como a los dos hijos que tomo por suyos casi desde el primer momento, a pesar de lo dificil de la situacion nunca falto hogar, ropa limpia y comida en la mesa. Luego de un tiempo tuvieron una niña juntos, la felicidad para el y la gloria para ella. El hombre trabajo mas duro porque nada faltara en su hogar. Como hijo de una generacion un tanto deforme, se perdio en tentaciones y situaciones consideradas inmorales... pero su mujer estuvo siempre cerca para sacar a los demonios de su vida. Y asi fue... tal vez sin su ayuda el tambien hubiera cambiado para ser mejor por su familia, pero sin ella el proceso podria haber sido menos exitoso y mas tardio. Ambos dedicaron un gran esfuerzo en educar a la familia sin diferencias, a los niños como hermanos, al padre como padre. Al llegar el segundo hijo de la pareja, nueve años