Boom! la modernidad nos vuelve locos,
prefiero enamorarme de unos ojos y no de sus fotos,
prefiero verte de frente y abrazarte
pero si no dejas el aparato voy a largarme solo.
.
Tiene un blackberry para estar siempre en contacto con su gente
y ahora siempre la veo detras del aparato este,
nisiquiera hablamos casi, siempre esta pendiente
al sonidito que le indica que algo esta pasando urgente.
¿Solia besarte? no, ya ni lo intentes,
ahora la prioridad es enterarse en el instante
de retenes y bloqueos y bombazos,
suena interesante pero es morbo mas que ganas de informarse.
Ya ni nos voltean a ver, todas en sus iphones,
ya no sabes lo que hacer, ganas de matar ¡yo!
amaba salir a caminar sin celulares
y hoy las niñas se quieren morir sin poder conectarse.
No voy a aconsejarte, no puedes detenerlas,
yo no me involucro con la necedad eterna
de una mujer que esta aferrada a algo,
olvidan al tipo con el que van a la fiesta por twittearlo.
.
Boom! la modernidad nos vuelve locos,
prefiero enamorarme de unos ojos y no de sus fotos,
prefiero verte de frente y abrazarte
pero si no dejas el aparato voy a largarme solo.
.
Pegado a su computadora todo el dia,
¿como espera que en la calle ella le sonria?
si aqui no hay messenger, esto se llama vida
y se le esta escurriendo entre los dedos llena de apatia.
¿Ibas a bares a ligar? olvidalo
hasta los meseros van pegados al telefono,
sales a la calle y cada quien va sumergido
en los audifonos, cerrados a los sonidos del mundo.
Ya ni las voltean a ver, todos en su mp3,
ya no pueden conocer hombres sin el internet,
con interes de saludar de mano y besar
y esos niños deberian morirse de la vergüenza.
No puedo ayudarte, no puedes salvarlos,
yo no me involucro con estos niños modernos,
que abren un libro solo por verse interesantes
y olvidan a la chica del cafe por enviar mensajes
.
Boom! la modernidad nos vuelve locos,
prefiero enamorarme de unos ojos y no de sus fotos,
prefiero verte de frente y abrazarte
pero si no dejas el aparato voy a largarme solo.
prefiero enamorarme de unos ojos y no de sus fotos,
prefiero verte de frente y abrazarte
pero si no dejas el aparato voy a largarme solo.
.
Tiene un blackberry para estar siempre en contacto con su gente
y ahora siempre la veo detras del aparato este,
nisiquiera hablamos casi, siempre esta pendiente
al sonidito que le indica que algo esta pasando urgente.
¿Solia besarte? no, ya ni lo intentes,
ahora la prioridad es enterarse en el instante
de retenes y bloqueos y bombazos,
suena interesante pero es morbo mas que ganas de informarse.
Ya ni nos voltean a ver, todas en sus iphones,
ya no sabes lo que hacer, ganas de matar ¡yo!
amaba salir a caminar sin celulares
y hoy las niñas se quieren morir sin poder conectarse.
No voy a aconsejarte, no puedes detenerlas,
yo no me involucro con la necedad eterna
de una mujer que esta aferrada a algo,
olvidan al tipo con el que van a la fiesta por twittearlo.
.
Boom! la modernidad nos vuelve locos,
prefiero enamorarme de unos ojos y no de sus fotos,
prefiero verte de frente y abrazarte
pero si no dejas el aparato voy a largarme solo.
.
Pegado a su computadora todo el dia,
¿como espera que en la calle ella le sonria?
si aqui no hay messenger, esto se llama vida
y se le esta escurriendo entre los dedos llena de apatia.
¿Ibas a bares a ligar? olvidalo
hasta los meseros van pegados al telefono,
sales a la calle y cada quien va sumergido
en los audifonos, cerrados a los sonidos del mundo.
Ya ni las voltean a ver, todos en su mp3,
ya no pueden conocer hombres sin el internet,
con interes de saludar de mano y besar
y esos niños deberian morirse de la vergüenza.
No puedo ayudarte, no puedes salvarlos,
yo no me involucro con estos niños modernos,
que abren un libro solo por verse interesantes
y olvidan a la chica del cafe por enviar mensajes
.
Boom! la modernidad nos vuelve locos,
prefiero enamorarme de unos ojos y no de sus fotos,
prefiero verte de frente y abrazarte
pero si no dejas el aparato voy a largarme solo.
Pinche modernidad en la que los dispositivos para derribar fronteras de distancia sirven para extender la distancia donde antes no había fronteras. Y es que no es la tecnología, es la méndiga falta de búsqueda propia sumada a la falta de encuentros ajenos con los "ellos mismos" y aquí, el eso que siempre nos orilla al aislamiento (sí, el aislamiento que nos da joyas y nos hace deseosos de volver a compartir con alguien más, alguien real), se ensordece bajo la luz del emoticón.
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