Eventualmente voy a terminar bastante tatuado, en algun momento el alcohol no me tendra anestesiado, y sera en ese punto en el que no me acuerde de ti, porque para poder vivir no te necesito a mi lado. Amor a la tinta que pinta mi piel por afuera, por dentro la sangre me hierve y mancha las aceras, cada que vomito un bonito cuadro de esta vida entre el bien y el mal, entre la paz y la guerra. Alfredo Pineda es ese, el que no crece, al que le duele que tu dolor no le pese.